Uno de los pintores más importantes del Siglo XX, el ruso Vasili Kandinsky, llega al museo del Palacio de Bellas Artes en la CDMX a través de la exposición “Pequeños mundos”, en la que pretende mostrar su abandono a la tradición pictórica de representación de la época, para dar paso a favorecer a la “necesidad interior” y convertirse en el “padre de la abstracción”.
La exposición está organizada en cinco secciones con obras de siete colecciones internacionales, cada serie revela varias maneras, motivos, esquemas y configuraciones que expresan las impresiones que el artista experimentó en sus viajes por regiones y culturas que enriquecieron su paleta con tonalidades nuevas, algunas más vivaces e intensas.
Recordemos que el arte abstracto es uno de los estilos artísticos más contrastantes, pues debido a su enorme popularidad se le confronta la enorme incomprensión que despierta en la mayoría del público, y a casi 100 años de su invención, esta exposición es importante para conocer el discurso liberador de su legado, ya que plantea que el arte no debe ser opacado por la historia, la religión o el poder, es decir que el arte sólo se encuentra en sus elementos básicos, como el punto, las figuras y los colores.
Obras como “La canción” muestra el inicio de su trayectoria bajo la influencia de los paisajes y la arquitectura rural rusa, así como las técnicas impresionistas poco avaladas por las instituciones académicas de su época. Mientras que en la obra “Lago” se observa la liberación que hace el artista ruso de esos paradigmas estéticos con brillantes colores e intensas pinceladas.
La exposición estará disponible en el Palacio de Bellas Artes del miércoles 31 de octubre al domingo 27 de enero de 2019, con horario de 10:00 de la mañana a 6:00 de la tarde; el costo general es de $ 65 pesos. La entrada es libre para quienes cuenten con credencial del Inapam, de capacidades diferentes, de maestros y de estudiantes. El domingo el pase es gratis para todos.